10 DELHI- JAISALMER

Llegamos a delhi con 45 minutos de retraso, corremos a coger un taxi. Para ir a la estacion se tarda una hora, no sabemos si llegaremos.
El taxista solo habla hindu, y mueve la cabeza haciendonos entender q lo ve mal.
Si nos quejamos de la ronda de Barcelona en horas punta, tendriais q verlo aqui. My god, es un caos total no nos extraña q los retrovisores vayan caidos o para dentro, si es q no se dan porque Dios no quiere. Chus va frenando todo el trayecto, acaba siempre con agujetas en la pierna.
Vamos cruzando Delhi, nos acompaña siempre la banda sonora de claxons. Quedan 10 minutos para q salga el tren, estamos cerca. Madre miA, despues de pasar por la nueva delhi, llegamos a la parte antigua cuanta pobreza, cuanta suciedad, que bullicio, gente x todas partes, montones de ellas durmiendo en las calles.
5 minutos, llegamos pero el taxista nos deja al otro lado, hay q cruzar, my god, cómo? No paran de pasar coches, motos, camiones. Lo intentamos nada, para atras otra vez,  de pronto una señora mayor es nuestra salvacion, ella cruza y nos pegamos a su lado, miramos al frente no sea q nos acojonemos. Llegamos, quedan dos minutos, cruzamos la estacion corriendo tambien llena de gente por el suelo durmiendo, esperando.
En el anden ya esta el tren, no sabemos en q vagon vamos, le preguntamos a un chico y nos acompaña al vagon. Es subir y salir el tren. Por los pelos!
Somos tres y estamos 2 en un compartimento de 4 y una en otro. Ni hablar, las tres juntas, aunque 2 durmamos en una litera. Se nos caen cuando vemos donde vamos a pasar la noche, hay un hombre en una litera,  es incapaz de ayudarnos cuando intentamos subir las mochilas, q distinto de lo q hariamos nosotras.
Nos traen la cena, no incluida en el trayecto, teniendo en cuenta q solo hemos desayunado nos comemos lo comible.
Baño, q os vamos a contar. Mejor no ir, aguantando como unas campeonas.
En todo el vagon no hay ni una sola mujer, ni ningun giri como nosotras,  solo hombres del pais.
Hay una litera libre, q la ocupamos, pero a las 12 de la noche, se sube un monton de gente y q mala pata su asiento es esa litera, le pedimos si no le importa cambiarnos el asiento para poder estar las tres juntas. No le importa, q alivio.
Vamos a intentar dormir, menos mal q tenemos nuestro saco del decatlon porque tienen el aire puesto y nos da de lleno. Nos dan mantas pero la verdad no nos inspiran mucha confianza.
Como anecdota, el hombre q esta con nosotras le pregunta a Laia si soy su madre. Se queda ahi.
Llegamos a jaisalmer al dia siguiente, a la hora prevista. Primera noche en el tren superada.